Partes de la máquina de coser

Ha llegado el gran día, por fin te sientas delante de una máquina de coser. Ruedas, botones, palancas y un sinfín de opciones se presentan ante ti. ¡Que no cunda el pánico! Vamos a explicar las partes básicas y para qué sirven.

Para empezar, vamos a ponerle nombre a cada uno de los elementos que la componen:

El estuche de accesorios móvil permite tener más o menos superficie de costura. Con el brazo libre podéis coser más fácilmente partes circulares como puños y cinturillas, esto evita que la tela se amontone y pliegue alrededor de la aguja.

Dependiendo de cada máquina, la ubicación de los elementos puede variar. Os recomiendo mirar el librito de instrucciones de vuestra máquina de coser, donde aparecen detalladas todas sus características.

De ahora en adelante ya tenéis best seller ;)

Acciones habituales

Para la realización de cualquier labor existen cuatro acciones fundamentales que necesitaréis aprender a ejecutar con soltura.

Conectar y encender la máquina

El elemento central en esta parte es el pedal, que sirve para regular la velocidad de la máquina de coser. Para aumentar la velocidad hay que presionarlo suavemente y para disminuirla, soltar un poco el pie. Con el tiempo veréis que es prácticamente imposible coser con zapatos que se puedan considerar monos…

Es necesario conectar el pedal a la toma de corriente por un lado y a la clavija de la máquina por otro. A continuación pulsamos ON y la máquina ya está encendida (junto con la lucecita situada cerca de la aguja). El volante manual se utiliza para subir y bajar la aguja manualmente. Es recomendable girarlo siempre hacia nosotras, no al contrario.

Cambiar la aguja

Existen diferentes tipos de agujas en función del grosor y elasticidad de los tejidos. Es aconsejable ir cambiándola de vez en cuando para que la punta esté afilada y así no dañar la prenda que estemos cosiendo.

Para cambiar la aguja la barra de aguja debe estar en su posición más alta, esto lo conseguiremos girando manualmente el volante hacia nosotras. A continuación se afloja el tornillo de la aguja y la aguja sale tirando de ella hacia abajo. Colocamos la nueva aguja con la parte plana contra la barra de aguja y la empujamos hacia arriba todo lo que podamos, después apretamos firmemente el tornillo con ayuda de un destornillador.

Elevar la palanca del prensatelas

Esta palanca se sube y se baja manualmente y se emplea para llevar arriba y abajo el prensatelas.

Cambiar el pie del prensatelas

Como habréis podido comprobar, en vuestro estuche de accesorios hay diferentes tipos de pie. Cada uno de ellos es adecuado para un tipo de costura diferente y existen muchos más… pero ¡que no cunda el pánico! Por ahora nos sobra y nos basta con el pie universal (mostrado en la foto), que es el que trae por defecto toda máquina.

Para cambiar el pie es necesario poner en práctica los pasos que hemos aprendido: tener la aguja en su punto más alto (girando el volante) y el prensatelas arriba (elevando la palanca). Una vez el terreno está despejado, desenganchamos el pie (en mi máquina se hace pulsando un botón rojo), que varía de forma en cada máquina. Para colocar el pie es necesario ponerlo encima de la placa de aguja, alineando la hendidura con la parte correspondiente del prensatelas. A continuación bajamos el prensatelas con la palanca, oiremos un clic siempre que pie y prensatelas se hayan enganchado correctamente.

Hora del té

¡Y hasta aquí los básicos! Ya conocemos el volante manual, podemos cambiar una aguja y el misterio de la palanca ha sido desvelado. La máquina empieza a ser vuestra amiga. Para consolidar esta relación y ganar confianza, no dejéis de practicar.