Coquetear con la romática idea de disponer de mañanas enteras (¡o días!) para dedicar a nuestros proyectos de costura es de lo más natural. Pero, debido a nuestra apretada agenda de deberes y responsabilidades, no siempre disponemos de ese preciado tiempo.

En el post de hoy vamos a reflexionar sobre nuestro tiempo disponible y lo flexible que puede resultar si nos lo proponemos. ¿Listas para darle la vuelta al reloj y encontrar tiempo para coser?

Encontrar tiempo para coser | Betsy Costura

 

Encontrar ese preciado tiempo no es sencillo, pero si nos sentamos a analizar las actividades que hacemos cada día y el tiempo que les dedicamos, podemos encontrar los preciados “ratos muertos” que tenemos entre tarea y tarea.

Quizá si nos levantamos media hora antes (con la casa en calma y la mente fresca), o aprovechamos la sobremesa del mediodía o de la noche, podemos encontrar pequeños paréntesis de tiempo extra que pueden convertirse en breves (pero apasionantes) oasis de costura.

Es muy motivador pensar en la happy hour de la costura durante el día, ayuda a llevar con alegría el trabajo y mantiene nuestro espíritu motivado.

Con esta filosofía, antes de que os deis cuenta habréis cosido varios proyectos, y vuestra productividad (y buen humor) habrán aumentado considerablemente.

Tiempo de calidad

Al principio puede resultar un tanto frustrante dedicar a la costura espacios de tiempo tan breves, pero ¡funciona! El objetivo es convertir estas microsesiones en un hábito que, cuando lo tengamos interiorizado, formará parte de nuestra cotidianidad y no tendremos que hacer un esfuerzo extra.

 A continuación vamos a ver algunos consejos que nos servirán para conseguir que este tiempo sea de calidad y de provecho:

  • Pensar el tipo de actividad que podemos hacer en esos espacios de tiempo (ya sean 15, 20 o 30 minutos).

En función de si tenemos luz natural, si podemos utilizar la máquina de coser (a no ser que sea un modelo super silencioso) o de nuestro cansancio mental, escogeremos la tarea más adecuada: copiar patrones, leer algún post sobre técnicas nuevas, experimentar en un retal una nueva costura, hilvanar una parte de la prenda…

Cualquier pequeño adelanto será mejor que ¡lamentarse por no poder coser! Además fomentamos la sensación de estar “conectadas” al proyecto, que es positivismo a raudales.

  • Informar a nuestro entorno de nuestro propósito.

Explicar que vamos a tomarnos un pequeño respiro a una determinada hora y que durante este tiempo, a no ser que haya una urgencia, ¡es como si no estuviéramos! Una buena idea es diseñar un cartel gracioso y colgarlo de la puerta (cerrada). A la vuelta de nuestra sesión de costura, volvemos a estar disponibles y con las pilas recargadas. ¡Las interrupciones pueden esperar 30 minutos!

  • Disponer de un tiempo de máxima concentración.

De manera que móvil en silencio, redes sociales en espera y mail oculto. Una música que nos inspire es la mejor aliada para que nuestra mente sintonice la onda correcta.

Metodología en la costura

Una vez localizada esa mágica franja horaria, podemos poner en marcha algunas de las siguientes recomendaciones, que harán que nuestra costura avance viento en popa.

  • Comprimir tareas periódicas, como calcar patrones o cortar prendas.

Si no disponemos de un espacio fijo de trabajo y tenemos que desmontar el comedor para cortar una prenda, resulta muy útil agrupar un par de proyectos y cortarlos a la vez. Teniendo cada proyecto organizado en una bolsa con toda la información en una hoja es suficiente para no enredar más de la cuenta.

También resulta muy útil agrupar las compras de tejidos y materiales, llevando toda la información con nosotras ¡en el móvil! Así, si un día (de camino al trabajo o a una cita) pasamos por delante de una despampanante tienda de tejidos, podemos buscar lo que necesitemos.

Podemos crear un álbum en la galería dedicado a este fin, y hacer una foto del modelo seguida de otra foto de la lista de tejidos y fornituras ¡Nuestra lista de la compra siempre a mano!

Fotografiar los futuros proyectos de costura y sus materiales | Betsy Costura

 

  • Unificar proyectos que requieran de los mismos recursos.

Francamente, a mi entender, el mayor reto. En ocasiones podemos coser varias prendas con el mismo color de hilo y la misma aguja. Esto nos puede ser muy útil cuando tenemos la overlock o la recubridora enhebradas y queremos aprovechar los hilos puestos.

  • Escribir un diario de costura.

Será suficiente una pequeña libreta cerca de la máquina de coser, en la que iremos apuntando todos los detalles importantes del corte y confección de la prenda. Así, de un vistazo, nos pondremos al día y no perdermos tiempo buscando entre piezas de papel y revistas las indicaciones clave.

Además, es el lugar idóneo para guardar pequeñas muestras de costura y observaciones que nos servirán de referencia para futuros proyectos. Un diario de costura tiene que tener tachones, telas enganchadas y muchos dibujos para que sea formalemente considerado pieza de utilidad.

Con el tiempo, tendréis una pequeña colección de libretitas que serán la delicia de vuestras reuniones.

Diario de costura cerca de la máquina de coser | Betsy Costura

 

  • Dedicar tiempo a investigar.

En casi todos los proyectos aparecen dudas respecto a técnicas o maneras de coser un tejido. Que la prisa y la mala praxis no se adueñen de vosotras, si es necesario dedicar un par de minisesiones para indagar en libros, blogs o revistas… ¡adelante! Y no olvidéis anotar todos los progresos en el diario de costura.

  • Practicar la costura social.

Hay determinadas partes de una prenda (colocar con alfileres las mangas, hilvanar a mano un dobladillo, coser botones…) que se pueden hacer perfectamente mientras pasamos tiempo con nuestro entorno, ya sea en un picnic en la montaña o viendo una película.

Cada costurera tiene su forma de hacer, de organizarse y de avanzar. Hoy hemos visto algunos consejos de fácil aplicación que con un poco de esfuerzo pueden mejorar y ampliar el tiempo que le dedicamos a la costura.

Espero ver pronto imágenes de vuestros diarios de costura, porque resultan muy inspiradores y creativos. Si tenéis algún truco o recomendación más, ¡estamos deseando escucharlo!

Se despide vuestra,

Betsy