Muchas de vosotras habréis comprado revistas de patrones, o habréis tenido la suerte de recibir en el amigo invisible un patrón de alguna firma indie. ¿Qué hacer una vez hemos desplegado la hoja de patrones?

En el caso de que las piezas no se pisen unas a otras, existe la tentación de recortar directamente la talla deseada; sin duda, una muy mala idea. Con esta solución tan radical, perdemos la posiblidad de poder sacar más tallas en el futuro, además de perder la referencia entre tallas, una información valiosísima.

En el post de hoy vamos a ver cómo sacar nuestra copia de un patrón utilizando los materiales adecuados (tiembla, papelería) y escogiendo la técnica que más se adapte a nuestras necesidades como modistas.

Materiales básicos para calcar patrones:

Material para patronaje

1  Cinta adhesiva invisible: el acabado mate hace que se pueda escribir sobre ella y se pueda pegar y despegar con facilidad. Es preferible que esté colocada en un portacelos, lo que facilitará su uso y nos servirá como peso para colocar sobre papeles y tejidos en nuestras sesiones de costura.

2  Papel para patrones: el de manila es el más utilizado; viene en hojas grandes de unos 60 x 80 cm, de color blanco. También se puede utilizar papel de embalaje, que viene en rollos. 

3  Rotulador: en la mesa de corte hay que tener un bote con rotuladores que no tengan la punta ni muy fina ni muy gruesa (para no alterar las líneas del patrón).

4  Lápiz puntafina: la línea que dibuja es muy fina y adecuada para calcar los contornos de un patrón con exactitud. Un lápiz normal puede servir, pero hay que afilarlo muy a menudo.

5  Pesos: en realidad podemos utilizar cualquier cosa que tengamos a mano. Las arandelas de la imagen se pueden encontrar en cualquier ferretería y son muy fáciles de usar y guardar.

6  Calibre de costura: es una regla graduada de unos 15 cm de largo, provista de una pestaña deslizable. Cuando necesitamos tener una medida que hay que aplicar en varios puntos, la dejamos fija y no hay que buscarla una y otra vez.

7  Ruleta marcadora: los dientecitos van dibujando puntitos a medida que la deslizamos por la línea deseada. Puede trabajar sola (marcando puntitos en el papel) o potenciar sus posibilidades en compañía del papel carbón.

8  Tijeras de papel: largas, ligeras y afiladas. No cortar nunca papel con las tijeras destinadas al tejido.

9  Papel carbón: especial para costura, no confundir con el papel carbón de papelería normal (que mancha muchísimo). Existen en diferentes tamaños y colores, siendo las hojas de 80 cm x 60 cm las más cotizadas, ya que permiten calcar patrones más grandes sin necesidad de mover el papel de carbón. Recordad que este papel no se utiliza únicamente para papel, sino también en tejido.

10 Regla de patronaje o plantilla de curvas: es una inversión que tarde o temparano hay que hacer. Este tipo de reglas tienen las curvas especialemente diseñadas para dibujar la forma de las sisas y las caderas. He utilizado varios modelos, pero el que muestro en la fotografías es de lejos con el que más satisfecha estoy por su forma, flexibilidad y regla graduada interior.

Una vez visto el material necesario para trabajar con patrones, vamos a ver cuál es su función en cada uno de los pasos hasta conseguir la copia de patrones en nuestra talla.

PASO 1 Copiar el patrón

Para conseguir la copia del patrón original, existen dos métodos diferentes:

Método 1 : Calcar

Es la forma más utilizada para sacar la copia de un patrón. No se necesitan materiales muy específicos, únicamente contar con una vista en buenas condiciones.

Los pasos son los siguientes:

  1. Reseguir con rotulador la talla deseada en el patrón, prestando atención a todos los símbolos de patronaje.

Repasar la talla seleccionada

 

  1. Colocar encima el papel de patronaje. En función del papel escogido, veréis más o menos a través de él.

Normalmente, a más transparencia, más fragilidad, y con un pequeño enganche el papel se puede rasgar. La clave es probar varios hasta encontrar el más equilibrado.

Colocar el papel de patrones encima del patrón

 

  1. Poner pesas encima de los dos papeles y unas tiras de cinta adhesiva en las esquinas para que quede todo fijo.

Poner pesas y celo en los papeles de patronaje

 

  1. Calcar con marcas intermitentes la línea de patrón que hemos reseguido con el rotulador.

Calcar con pequeñas rayas la talla

 

  1. Buscar la curva de la regla que más se adapte a las marcas que habéis calcado.

Calcar formas curvas a mano alzada da como resultado líneas tembolorosas y nada estéticas. Por ello, se debe utilizar la regla tanto en líneas curvas como rectas para lograr un dibujo de patrón limpio y pulido.

Repasar las marcas con una regla de curvas

Método 2 : Papel de carbón

Este método es el apropiado para aquellas de vosotras a las que no les hace ninguna ilusión pintorrojear el patrón que tanto os ha costado conseguir. Cierto es que las herramientas necesarias no son tan comunes pero, a parte de dejar el patrón (casi) intacto, vuestros ojos al acabar no necesitarán una sesión de colirio. Vamos a ver cómo proceder:

  1. Colocar los papeles en el siguiente orden y sentido: sobre la mesa, pondremos el papel de patronaje que quedará abajo del todo.
  2. A continuación, pondremos el papel de calco con la cara que contiene la tinta (el color es más fuerte) mirando hacia el papel de patronaje, esto es muy importante.
  3. Por último, arriba del todo tendremos el patrón original, con la cara impresa hacia arriba.

Poner el papel de carbón entre el patrón y el papel de patronaje

 

  1. Poner pesos y cinta adhesiva en esquinas y algún que otro punto conflictivo.
  2. Deslizar la ruleta por la talla deseada aplicando una fuerza media.

Si apretamos mucho la ruleta: por un lado, el patrón se resentirá porque haremos microperforaciones y, por otro lado, marcaremos la mesa. Así que, administrad vuestra hercúlea fuerza o tened una mesa de trabajo dispuesta a la customización.

Pasar la ruleta por la talla deseada

 

  1. Levantar la hoja del patrón y del papel de carbón para ver el resultado.

Como podéis observar, siempre he sobrepasado la línea de cruce en las esquinas para tener sufiente información y no tener huecos.

Línea del patrón pasada con el papel de carbón

 

Una vez copiado el patrón con el método escogido, vamos a continuar con la información que hay que añadirle.

PASO 2 Márgenes de costura

  1. Añadir los márgenes de costura si el patrón no los llevaba incluidos.

¿Cómo saber si un patrón lleva incluidos los márgenes de costura? Esta información la encontraréis en la revista o librito adjunto que viene en el sobre del patrón. Os especificará cuántos centímetros hay que añadir en cada costura, siendo lo habitual 1-1,5 cm para costuras y 3-4 cm para los bajos.

Dar el margen de costura

 

  1. Añadir toda la información a cada pieza del patrón calcado.

Cada pieza debe llevar:

  • Línea recto hilo, piquetes y otras marcas
  • Nombre del modelo
  • Talla
  • Nombre de la pieza (si es un delantero, un costadillo, una manga…)
  • Número de veces que se tiene que cortar en los diferentes tejidos
  • Número de pieza que se indica: 2/7 (es la segunda pieza de un patrón que tiene siete piezas de patrón)

Patrón calcado con toda la información

PASO 3 Recortar el patrón

  1. Patrón listo para ser recortado.

Patrón calcado con toda la información

 

Una vez tenemos todas las piezas del patrón recortadas, no está de más ponerles un clip o meterlas en un sobre para que no se pierdan. En más de una ocasión no he tenido más remedio que tirar patrones que no tenían su información escrita, y al no comprenderlos, tener que deshacerme de ellos.

Queridas, para evitar tan penosa situación no tengáis pereza y dedicad unos escasos minutos a bautizar a vuestros patrones.

En el siguiente post veremos cómo marcar y cortar una prenda en tejido, ¡acercándonos cada vez más a la construcción de una prenda! No quiero adelantar sorpresas, pero en Betsy se avecina un proyecto en el que usaremos toda la información vista en el blog.

Hasta la próxima,

Betsy